¿Cómo ha conseguido Ted Chiang ganar tantos premios con novelas cortas? Es sorprendente que Ted Chiang sea un escritor prolífico y conocido gracias a sus relatos, sin haber escrito ninguna novela larga. ¿Qué hacen que sus historias sean tan especiales?
Ted Chiang se ha hecho un nombre gracias a unas historias entre fantasía y ciencia ficción que tratan distintos temas sociales. Y consigue hacerlo vulgarizando conceptos complicados y jugando con ellos para personas que, como yo, no saben mucho de ciencia.
Primer libro de compilación de relatos: «La historia de tu vida» en España (o «La torre de Babilonia» en Francia)
- La torre de Babilonia (1990) – premio Nebula, premio John W. Campbell al mejor autor novel en 1992
- Comprende (1991)
- Dividido entre cero (1991)
- La historia de tu vida (1998) – premio Nebula y el Theodore Sturgeon Memorial. Este libro fue adaptado a película en “Llegada” de Denis Villeneuveen 2016.
- Setenta y dos letras (2000) – Sidewise Award
- La evolución de la ciencia humana (2000)
- El infierno es la ausencia de Dios (2001) – Nebula, Locus, Hugo
- ¿Te gusta lo que ves? (Documental) (2002) – nominada al Nebula, pero el premio fue rechazado por Ted Chiang porque lo escribió bajo la presión de su editorial y no consiguió que fuera como él quería.
Los relatos que ha escrito después también han ganado premios como Nebula o Hugo y han sido publicados en Estados Unidos en 2019 en otra compilación de relatos: «Exhalation». La traducción fue publicada en España a finales de 2020: Exhalación de la que hablo en otro artículo.
Resumen de los relatos de este primer libro de Ted Chiang
La torre de Babilonia:
En Babilonia, queda poco para terminar la torre que se alza sobre la llanura mesopotámica. En nada de tiempo se podrá tocar la bóveda del cielo y descubrir los secretos de Jehovah.
Es la historia de una ascensión, del miedo al vacío, de la gravedad y del respeto al poder de los Dioses, o a lo que no podemos controlar. No te despegas de la historia para saber lo que va a pasar con esa bóveda que hay que abrir. Te engancha desde las primeras líneas para seguir leyendo el resto del libro. No es por nada que fue utilizado como título de la compilación en francés.
Comprende:
Un hombre alcanza un grado de inteligencia tan alto que se asemeja a un dios. ¿Tendrá un final la perfección?
Esta historia tiene suspense desde el principio. Y sigues en cada línea al personaje principal en su desarrollo mental gracias a una especie de droga que le ha salvado la vida. Me recordó un poco a la película «Lucy» con Scarlett Johanson o a «Sin Límites» con Bradley Cooper, por lo que me resultó menos original que otros relatos del libro. Pero de muy agradable lectura.
Dividido entre cero:
La prueba de que las matemáticas carecen de sentido.
Al menos es lo que parece cuando lees la historia de la matemática que encuentra una demonstración capaz de crear dificultades a la ciencia de las matemáticas, pero también a su vida en pareja.
«Si el pensamiento matemático deja mucho por desear, ¿dónde encontraremos las verdades y certezas?»
Me impresionó lo documentada que estaba esta historia, se nota que el escritor es matemático.
La historia de tu vida:
El primer contacto con los extraterrestres tendrá también repercusiones inesperadas en la vida cotidiana de una reputada lingüista. Es una historia que fue adaptada en película con «La llegada» del director Denis Villeneuve.
Es una de esas historias que recomiendo leer antes de ver la película, aunque yo hice lo contrario. En el libro seguimos dos narraciones, una ordinaria y otra extraordinaria:
- La historia de la relación entre madre e hija
- Y las charlas con los extraterrestres cuyo lenguaje no tiene nada que ver con el nuestro. La protagonista tiene como misión investigar para qué han venido a la Tierra.
Y Ted Chiang consigue que desde el principio entendamos que hay un vínculo entre ambas narraciones por las formulaciones extrañas que utiliza la protagonista y narradora:
«Me acuerdo cuando tendrás un mes; te sacaré de la cama para darte la leche de las dos de la mañana. Tu habitación infantil «olerá a bebé»: una mezcla de talco y de pomada…».
Consigue que salgamos de esta historia con serias preguntas sobre el determinismo: todo acontecimiento está determinado por la irrompible cadena causa-efecto; por lo que nuestro estado actual determina el futuro.
Setenta y dos letras:
La cábala y la teoría de la preformación se combinan en una Inglaterra victoriana salida de nuestros sueños, o de nuestras pesadillas. Ante la llegada de los metahumanos, la ciencia humana se ve reducida a una nota a pie de página.
No entiendo porqué no me ha gustado esta historia. Es sumamente original, pero la intriga y el desarrollo de la trama los encontré pesados, algo confusos. Es la historia que menos recomiendo de este libro.
La evolución de la ciencia humana:
Es el relato más corto del libro. Se trata de un artículo científico imaginado en una época en la que los metahumanos existen en la Tierra. Estos últimos tendrían un sistema de comprensión y comunicación muy diferente de los simples escritos, lo que hará que sus descubrimientos sean inaccesibles a las personas que no son meta.
Tampoco es mi preferido a pesar de que, reemplazando los metahumanos por la inteligencia artificial, me llevaría a una reflexión interesante: algunos estudios revelan que dentro de poco no entenderemos lo que la inteligencia artificial pensará o decidirá (ver artículo sobre el mundo digital).
El infierno es la ausencia de Dios:
En un universo donde Dios existe sin que quepa ninguna duda, ¿es posible no amarle?
En esta historia el destino de Neil Fisk cambia completamente cuando su mujer muere debido a la visita de un ángel.
Sí, has leído bien, ¡la visita de un ángel! Lo extraordinario de este relato es que Ted Chiang construye un mundo donde no hay dudas sobre la existencia de Dios, del cielo y del infierno. Las almas van al cielo o al infierno en función de su amor a Dios. Y los ángeles visitan la Tierra como si se trataran de catástrofes naturales, con milagros y víctimas inocentes, como la mujer de Neil Fisk, que sube al cielo. Pero ahí está lo difícil: ¿cómo asegurarse de ir al cielo cuando culpas a Dios de todas tus desdichas y no consigues amarle?
Es una historia original y con intriga. No paras de leer por saber cómo Neil Fisk conseguirá su propósito. Es uno de los mejores relatos de este libro, y creo que merece también una adaptación a película, como el relato de «La historia de tu vida».
¿Te gusta lo que ves? (Documental)
Y si pudieras programarte para ignorar las apariencias, ¿te arriesgarías a perder toda percepción de la belleza humana?
Debate
Si con un dispositivo implantado en el cerebro, sin peligro, sin efecto secundario, que se pudiera retirar fácilmente; si pudiéramos bloquear la percepción de la belleza del cuerpo humano: ¿querrías utilizarlo y erradicar del mundo los complejos de inferioridad vinculados a la apariencia física? ¿dejar de ser influenciados en función de la apariencia? ¿no ser manipulados por publicidades utilizando el cuerpo de mujeres (u hombres) como útil de venta? ¿te lo implantarías? ¿se lo pondrías a tus hijos?
Ese es el debate que crea Ted Chiang en este relato alrededor de la «caliagnosia», el nombre que inventa para designar el dispositivo del cerebro. Según explica, sería un invento basado en medicamentos utilizados para curar las agnosias, y en particular la prosopagnosia, la incapacidad de reconocer a las personas en función de sus rasgos faciales.
Documental
El relato está escrito en forma de un documental donde se suceden las opiniones de múltiples personajes como si respondieran a una entrevista. Ted Chiang demuestra ser un gran experto en retórica defendiendo los pros y contras, aunque él mismo explica en sus notas lo que habría decidido hacer. Cada punto de vista está muy bien argumentado lo que ha hecho que cambie de opinión a medida que leía. E incluso los personajes parecen cambiar de opinión a lo largo de la historia gracias a excelentes giros en la trama.
En algunos momentos me ha recordado el capítulo distópico de Black Mirror: Arkangel, donde una madre, preocupada por proteger a su hija, decide implantarle un dispositivo que filtra su percepción de la realidad.
Es una lectura ideal para pensar en la belleza y en su utilización en la sociedad, sobre la importancia de las apariencias y la influencia en el cerebro humano. Evidentemente este relato está en mis favoritos a pesar de que Ted Chiang no pensara haberlo escrito a su gusto. Pero los temas que trata me llaman mucho la atención y por eso hablo de ellos y de la presión por la delgadez (o la culpabilización de estar en sobrepeso) en este otro artículo sobre la alimentación y la salud.
Conclusión del primer libro de Ted Chiang
Te encantará este libro si te gusta la fantasía, la ciencia ficción y los libros distópicos (ver artículo qué es distopía) en particular. Es una lectura sorprendente, que permite considerar algunos conceptos y temas sociales desde ángulos nuevos y que crea universos innovadores.
Suscríbete a la lista de correo para estar informado de todo nuevo artículo de este blog:
Foto del ángel de Luke Stackpoole en Unsplash.
Buenas
Acabo de encontrar vuestra web y me encantó el tipo de temas que tratais
Saludos
Muchas gracias, Sara. No publico a menudo, pero espero alimentar el blog de más artículos. Espero que gusten 😉